Reinventar un personaje con años de historia, que todo el mundo recuerda con cariño es difícil. Lo primero es que tienes que hacer que el mismo personaje sea distinto, actualizarlo y darle un sentido en el mundo actual.
En realidad, todo un elenco de personajes, queridos y entrañables para generaciones, con el punto justo de recuerdos y de innovación, para despertar también el interés de los que nunca conocieron al personaje.
Un difícil equilibrio que se vuelve más sencillo cuando cuentas con un gran actor, como Steve Carrell, un actorazo como ha demostrado en The Office, donde es un jefe desquiciado, ridículo y completamente ajeno al mundo que le rodea, y aquí es un agente secreto torpe y bonachón, un personaje divertido y realista, con muchos, muchos guiños de humor a la vieja serie, pero cambiándola totalmente.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario